Edición 58, Finanzas

El sector del capital privado en México

Por: Emilio Afif
Ex alumno Economía, ITAM

En los últimos años, el crecimiento de los fondos de capital privado ha sido exponencial. Según la Asociación Mexicana de Capital Privado (AMEXCAP), a finales de 2015 había más de 140 fondos en México, con un capital comprometido acumulado desde 2000 de más de 29000 millones de dólares. El sector se ha duplicado en los últimos siete años, pero sigue siendo incipiente, pues representa menos del 0.1% del PIB, por debajo de países como Chile, Colombia y Perú. En Estados Unidos, esta cifra es de cerca del 1.3%, según la Emerging Markets Private Equity Association.

Los datos de la AMEXCAP indican que el 43% de los recursos comprometidos se han invertido en fondos de bienes raíces, el 35% en fondos de capital privado, el 15% en fondos de infraestructura y el resto en fondos de capital emprendedor y fondos que invierten en otros fondos.

Parte de este crecimiento exponencial se debe a que desde 2007, tras un cambio de las regulaciones, las afores pueden invertir en fondos de capital privado por medio de instrumentos dedicados llamados certificados de capital de desarrollo (CKD).

Al cierre de julio de 2016, las afores habían destinado más de 155 000 millones de pesos a CKD y FIBRAS (5.5% del total de recursos administrados); sin embargo, el potencial de crecimiento todavía es alto, ya que las siefores pueden invertir entre el 25% y el 30% del total de los recursos en CKD y FIBRAS (excepto la Siefore SB1, que sólo puede invertir el 5% en FIBRAS). Las afores tienen preferencia por este tipo de instrumentos, ya que del total del monto emitido por más de 55 CKD, las afores se han quedado con el 80%. Lo que falta es producto.

A partir de diciembre de 2015, las afores pueden invertir en fondos de capital privado mediante un nuevo instrumento, los certificados de proyecto de inversión (CERPI), que se asemejan más a las sociedades de responsabilidad limitada, que es la forma en la que se invierte en Estados Unidos, Canadá y algunos países de Europa. La principal diferencia es que en las CERPI no se requiere que el comité técnico formado por los inversionistas apruebe las inversiones, sino que esta facultad la tiene el comité de inversión del fondo de capital privado, que normalmente está conformado por los socios del fondo y su equipo de inversión.

Una restricción de las afores es que el 100% de los recursos que se destinen a los CKD deben ser invertidos en México, lo cual reduce significativamente el número de fondos de capital privado en los que puede invertir una afore y concentra el riesgo al tener todas las inversiones de capital privado en México.

La mayor parte de los recursos invertidos en fondos de capital privado en México proviene de inversionistas extranjeros. Esto se debe a que algunos de los fondos son internacionales y a que hay fondos locales que reciben recursos de inversionistas extranjeros.

Los fondos son manejados por un equipo de profesionales, que gracias a su trayectoria y su reputación obtienen recursos de inversionistas institucionales, tales como aseguradoras, fondos de pensiones, fundaciones, fondos soberanos, individuos con un patrimonio cuantioso, family offices, bancos y otras instituciones financieras.

Por lo general, la intención de los fondos es invertir y trabajar en mejorar la empresa durante cinco años, para después venderla y obtener un rendimiento anual superior al 25% y multiplicar el capital invertido por más de 2.5 veces. Los fondos pueden vender la empresa a un inversionista estratégico (competidores, proveedores, etc.), a un inversionista financiero (fondos de capital privado, family offices, etc.) o al público inversionista mediante una colocación en la bolsa mexicana de valores.

La industria de capital privado se puede dividir de acuerdo con el tipo de empresa en la que el fondo va a invertir.

  1. Fondos de capital emprendedor.Se destinan a invertir en empresas de reciente creación. Estas empresas tienen un alto perfil de crecimiento y también corren un mayor riesgo. Según la etapa de desarrollo en la que se encuentre una empresa, este sector se puede subdividir en los siguientes elementos:
    • Capital semilla. Se invierte en una idea o proyecto. Normalmente estas empresas acaban de ser constituidas y no tienen un modelo de negocio probado. Sus ingresos son muy pequeños o nulos. En este segmento se enfocan los inversionistas ángel y las plataformas en línea de financiamiento colectivo, conocidas como crowd funding. El monto de la inversión puede ser de hasta 500 000 dólares.
    • Primera ronda o Serie A. El monto de la inversión es entre 500 000 y dos millones de dólares. Generalmente, los recursos obtenidos se destinan a cubrir los gastos de operación del negocio durante seis a veinticuatro meses.
    • Segunda ronda o Serie B. El monto de inversión es de entre dos y cinco millones de dólares. El objetivo es obtener los recursos para consolidar una empresa y crecer. En esta etapa, las empresas ya alcanzaron el punto de equilibrio.
    • Capital de crecimiento. Es el último nivel del capital emprendedor. Los montos de inversión superan los cinco millones de dólares. El objetivo es hacer crecer a las empresas y mejorar su rentabilidad.
  2. Fondos de capital privado.Se invierten en empresas consolidadas. Los fondos de este segmento se clasifican de acuerdo con la estrategia de inversión.Compras apalancadas. Se utiliza un alto porcentaje de deuda para financiar la adquisición. Como garantía, se otorgan las acciones de la empresa y sus activos. La idea es que durante un plazo de entre cinco y siete años la empresa crezca y pague la deuda con los flujos generados por su operación.
    • Capital de expansión. Se invierte en empresas que requieren recursos para seguir creciendo de manera acelerada, ya sea mediante adquisiciones de otras empresas, con nuevos proyectos o en otros mercados.
    • Distressed. Se invierte en empresas que están pasando por un momento difícil. Normalmente llevan a cabo una reestructura financiera y operativa para evitar la quiebra.
  3. Fondos de bienes raíces. Financiamiento de proyectos inmobiliarios.
  4. Infraestructura. Financiamiento de proyectos tales como plantas de electricidad, carreteras, agua, telecomunicaciones, etcétera.

Los fondos de capital privado y emprendedor ayudan a las empresas en las que invierten a fortalecer sus ventajas competitivas aprovechando sus oportunidades financieras, operativas o institucionales. Por lo general, las empresas en las que invierten se benefician de un mejor gobierno corporativo, un plan de negocios, un objetivo de creación de valor acelerado y una mejora en la toma de decisiones al fortalecer el análisis financiero y operativo.

En conclusión, el objetivo de los fondos es la creación de valor en las empresas en las que invierten, a modo de generar rendimientos atractivos para sus inversionistas. Esto reporta importantes beneficios a los empresarios, la sociedad y el gobierno, porque favorece el crecimiento en las empresas, abre fuentes de empleo, fomenta la economía, y al profesionalizar e institucionalizar las empresas, se transparenta el pago de impuestos y se refuerza el cumplimiento de las normas laborales, ambientales y de responsabilidad social.

Referencias

AMEXCAP (2015). Capital privado y emprendedor. México, RiskMathics.
EY (2015). Estudio sobre la industria de capital emprendedor en México.
KPMG (2015). El impacto del capital privado para las empresas en México. 17 casos de éxito.

Publicar un Comentario

Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos requeridos están marcados con un *

*
*

Puedes usar estas etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>